Son tres las culturas preincaicas que se desarrollaron en esta zona y que sus legados se pueden apreciar hasta el día de hoy: Mochica, Lambayeque y Chimú. 

Al enfrentarse a las difíciles condiciones de los bosques secos estas tres culturas se convirtieron en hábiles arquitectos e ingenieros hidráulicos. Eso, acompañado con sus trabajos metalúrgicos y en cerámicas, los convirtieron en importantes representantes de las culturas preincaicas.

Los Mochicas o Moches, cultura que se desarrolló entre los siglos II y V en lo que hoy se conoce como Trujillo, fueron grandes arquitectos y realizaron importantes obras de ingeniería hidráulica. Además, como lo muestra el Señor de Sipán, fueron los mejores metalurgistas de su época, dorando el cobre antes que en Europa y desarrollando una variedad de técnicas que utilizaron en armas, atuendos y ornamentos. Pero por lo que son más conocidos son sus cerámicas. Son considerados los mejores ceramistas del Perú antiguo gracias a su fino y elaborado trabajo. Hoy, sus huacos retratos y huacos eróticos son reconocidos en todo el mundo.

La cultura Lambayeque se desarrolló en la misma zona entre los siglos VIII y XIV.

Ellos tomaron los avances de los Moches en arquitectura y en sistemas de irrigación como punto de partida y los mejoraron. También sorprenden sus mezlcas de metales y finos acabados que se pueden apreciar en los tumis. Aunque no lograron expandir su poder como lo hicieron los Moches, fueron sus grandes discípulos artísticos, en especial en sus joyas.

Finalmente están los Chimú. De las tres culturas, son los que más destacan en lo urbanístico gracias a impresionantes construcciones, como lo son Chan Chan y la fortaleza de Paramonga. También tuvieron importantes avances en metalurgia, mezclando técnicas y metales en sus trabajos, y en sus textiles.

Este importante legado cultural se puede descubrir de cerca en los muchos museos y centros arqueológicos que se ubican en la ciudad de Lambayeque. Los Complejos Arqueológicos Huaca Rajada, donde se encuentra en Señor de Sipán, y el de Tucume, son excelentes lugares para conocer más sobre las culturas mochica y chimú, respectivamente. Por su parte, el Cerro Ventarrón, cuenta con murales con más 7 mil años de antigüedad. Y, para los que buscan una mezcla de naturaleza con historia, están también el Santuario Histórico Bosque de Pomac. Patrimonio Cultural de la Nación y el Cerro Corbacho.